La actividad académica, unida a la formación ética, moral e integral de la persona humana, constituye el quehacer fundamental de la Universidad, y se rige por el Estatuto Interno, el Reglamento Académico, la Ley de Educación Superior y su Reglamento, las Normas Académicas de la Educación Superior, la Ley de Universidades Particulares y demás disposiciones emanadas de sus Órganos Superiores.
El Estatuto constituye el ordenamiento jurídico fundamental interno de la Universidad. En él sé norma lo referente a los Órganos Superiores de la Universidad y sus Órganos Ejecutivos, en cuanto a su constitución, organización y funcionamiento; el Régimen Académico, que comprende la Actividad Académica y sus funciones de Docencia, Investigación y Extensión, el papel del docente y estudiante universitario y el patrimonio de la Institución. Este ordenamiento se complementa con el Reglamento Académico que regula las modalidades de admisión, permanencia, retiro, promoción y categorías de estudiantes; los sistemas y procedimientos de evaluación, otorgamiento de equivalencias, desarrollo estudiantil, sus deberes y derechos; asociaciones estudiantiles; honores académicos, sistema disciplinario; grados académicos que se otorgan, así como lo referente a deberes y derechos de los docentes.
La anterior normativa está totalmente acorde con lo establecido en la Ley de Educación Superior y su Reglamento, y en las Normas Académicas de la Educación Superior que rigen a todos los Centros de Educación Superior del país.
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